Petroleras recibirán subsidios para evitar despidos

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La Casa Rosada prometió ayudar a Chubut; el gremio suspendería las paritarias.





El petrolero Carlos Bulgheroni se fue primero de la reunión en el Ministerio del Interior. Sin sobresaltos, recorrió diez metros por el Patio de las Palmeras de la Casa Rosada y contestó la pregunta: "Vamos avanzando para alcanzar una solución. En los próximos días va a llegar", anticipó. Llevaba en una delgada carpeta de plástico dos propuestas de las empresas del golfo San Jorge para evitar despidos por la crisis del crudo, que afecta en especial a Chubut y tiene en vilo a la provincia. La primera pedía que el Gobierno subsidiara al sector con US$ 515 millones este año para llevarles tranquilidad a unos 5000 empleados patagónicos cuyos trabajos, según el gremio, están en riesgo. La segunda pedía US$ 424 millones.

El Gobierno no se comprometió en los detalles, pero admitió que habrá algún gesto. El sindicato petrolero de Chubut aceptaría suspender las paritarias si no hubiera despidos.

Volverán a reunirse el viernes y, si todo avanza, tratarán de firmar el lunes un documento que disipe la incertidumbre petrolera al menos por este año.

El optimismo de Bulgheroni, uno de los dueños de Pan American Energy (PAE), fue el epílogo de un encuentro tenso del que participaron los ministros Rogelio Frigerio (Interior), Juan José Aranguren (Energía) y Jorge Triacca (Trabajo); Gustavo Lopetegui (coordinador económico de la Jefatura de Gabinete); el gobernador de Chubut, Mario Das Neves; el secretario general del gremio petrolero de esa provincia, Jorge Ávila, y el intendente de Comodoro Rivadavia, Carlos Linares. Por las empresas también estuvieron Miguel Galuccio (YPF), Carlos Ormachea (Tecpetrol, del grupo Techint) y Martín Cittadini, de EnapSipetrol.

Por la crisis de los precios internacionales del crudo, Chubut se enfrenta a una especie de maldición geológica. Cuando las empresas exportan petróleo, cuya calidad sufre desde siempre penalizaciones en el mercado internacional, reciben entre 18 y 19 dólares por barril, mientras que en algunos casos su costo de producción alcanza los US$ 40. En otros términos: hoy les conviene dejar de producir para exportar, aunque están dispuestas a trabajar sin que eso "vaya a dividendos", como explicó un ejecutivo, con tal de que se mantenga la paz social. Lo dicen por experiencia: en 2012 un conflicto petrolero llevó a cero la producción de Cerro Dragón, el mayor yacimiento del país, que opera PAE.

Cuando no estaba claro que la reunión llegaría a buen puerto, Frigerio buscó tranquilizar los ánimos. "El Gobierno va a hacer el esfuerzo que haya que hacer", les prometió a sus interlocutores patagónicos.

Su par de Energía había insistido en la discusión sobre los números. Según la lectura de quienes participaron del encuentro, con la intención de que las empresas hicieran un esfuerzo mayor. Eso le generó un cruce con Das Neves. "Ustedes hablan de números y yo hablo de gente", arremetió. El gobernador fue un poco más lejos. Le achacó a Aranguren que le hacía recordar a las discusiones que mantenía en los años '90 con el ministro de Economía Domingo Cavallo. "Cuando le pedía una ruta me preguntaba cuántos autos pasaban por ahí. Yo le decía que me hiciera la ruta para que pasaran más autos", les recordó. Al salir ya estaba más calmado y no quiso hablar del episodio. Justificó que todo quedaría "en las cuatro paredes" del Ministerio. Hasta habló con el jefe de Gabinete, Marcos Peña, para agradecerle la "buena predisposición" del Gobierno para atender el problema.

Ávila también salió enojado de la reunión, aunque expectante. Criticó a Aranguren cuando sostuvo que los CEO (el ministro fue presidente de Shell hasta mediados del año pasado) tienen una visión de empresa, diferente a la línea política, en la que involucró a Frigerio y a Triacca.

El sindicalista sorprendió a la prensa con una promesa inesperada: "¿Qué tienen para ofrecer los trabajadores en un posible acuerdo? Las paritarias de este año", arremetió. Es el primer jefe gremial que esboza una propuesta de ese tipo. Ante la consulta de un cronista incrédulo, aclaró: "Si me prometen que no va a haber despidos, y sólo si la asamblea de los trabajadores me da el mandato".

Es improbable que la promesa del sindicalista se cumpla en esos términos. Las empresas creen que deberán al menos ajustar su plantilla cualquiera sea la ayuda oficial.

La Cuenca del Golfo San Jorge produce 40.000 metros cúbicos (m3) diarios de crudo, de los cuales 7500 m3 se exportan. Por un acuerdo entre el Gobierno y las empresas, hay un precio sostén de US$ 54,9 el barril para el mercado interno.

Las empresas quieren que el Estado se haga cargo de la diferencia con el valor de exportación (poco más de US$ 30 por barril). En el peor de los casos, el costo fiscal para el Estado según los valores actuales será de US$ 515 millones para este año.

Galuccio ofreció una alternativa: prometió que en junio entrará en marcha una nueva instalación en la refinería de La Plata que consumiría un 50% del saldo exportable de Chubut. Por el momento, sus futuros clientes desconfían de los tiempos.

Claves de la negociación

Precio internacional

En los últimos meses el precio internacional del petróleo se desplomó y generó problemas en el sector

Estímulo local

El Gobierno dispuso un precio "sostén", sólo para el mercado interno

Mal negocio

Hoy una empresa de Chubut recibe US$ 19 por barril cuando exporta, menos que su costo

Fuente: La Nación
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