Mató a golpes a un ladrón que tenía encañonado a su padre

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Fue muerto por una de las víctimas. Sucedió en una finca de Mendoza. Dos ladrones encañonaron al encargado de 66 años y su hijo de 27 quiso defenderlo.






La impotencia se convirtió en furia en las manos de un joven que junto con sus padres fue asaltado en la finca en la que trabajaban en San Martín. Al ver que dos delincuentes encañonaban a su familia, tomó lo que encontró a mano y terminó matando a golpes a uno de los asaltantes. El ladrón muerto, de 39 años, tenía varios antecedentes por robo contra la propiedad y también de vehículos.

En la noche del sábado todo era silencio en esa zona rural de Montecaseros, en la esquina de carril Anzorena y calle Florida, al norte de San Martín. Tal vez por eso a Juan Carlos Morales (66) le llamó la atención los ruidos que escuchó fuera de la casa en la que vive como encargado de la finca Lombardo.

Sin dudarlo, el hombre habría salido a ver qué ocurría y fue allí cuando lo sorprendieron dos delincuentes que lo encañonaron y lo obligaron a entrar. A esa hora, pasadas las 23, en la casa hacían sobremesa Leonarda Gutiérrez (66), pareja de Juan Carlos, y el hijo de este, Juan Alejandro (27).

Con el dedo en el gatillo, los asaltantes exigían el dinero de un supuesto pago que la familia habría recibido recientemente. Está claro que llegaron hasta allí con un dato que creyeron certero, ya que no hay manera de equivocarse de propiedad. En esa zona rural el domicilio más cercano se encuentra a no menos de 100 metros de distancia.

Ante la exigencia, el hijo de Juan Carlos intentó calmarlos diciendo que iría a buscar el dinero a una habitación, pero cuando volvió lo hizo con un hierro en mano, y con él comenzó a golpear sin descanso a uno de los delincuentes.

Sorprendido, el cómplice comenzó a disparar el arma que empuñaba, mientras huía de la casa. Esos disparos le impactaron a Juan Carlos en el abdomen y en un hombro.

Aparentemente, la banda habría contado con un tercer integrante que aguardaba afuera a bordo de un VW Bora, en el que escaparon a toda velocidad.

En tanto, en el piso del patio quedó tendido Ceferino Antonio Sepúlveda (39), el asaltante que recibió varios golpes en la cabeza.

"En pos de defenderse, el joven que forcejeó con el delincuente le habría pegado con lo que encontró a mano. Se secuestró un martillo, un hierro, un palo y hasta una bocha con la que lo habría golpeado", contó un investigador del caso, que fue uno de los primeros en llegar al lugar y estuvo entre quienes constataron el deceso del delincuente.

Cerca de donde quedó tendido se encontró su DNI y, más tarde, tras el chequeo correspondiente, se confirmó su identidad.

Heridos e internados
Por los impactos de bala que recibió, Juan Carlos Morales fue trasladado al hospital Perrupato para ser asistido. En principio, el hombre iba a ser operado por el disparo que lo hirió en el abdomen.

En tanto su hijo también fue llevado al mismo centro sanitario por los traumatismos que sufrió en el forcejeo con el asaltante que abatió.

La pareja de Morales resultó ilesa.

Fuente: Diario Uno.
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