Bienestar Universitario aún no responde al reclamo de la FUSJ

La semana pasada la Federación Universitaria San Juan presentó una carta al Consejo Superior universitario para reclamar por aumentos en los precios de ciertos servicios a los estudiantes.

Alumnos reclaman por aumentos en distintas dependencias de la UNSJ.

El reclamo tiene que ver con el aumento del menú del comedor universitario de $5 a %7, la residencia de $600 a $1200, la cuota anual del palomar de $24 a $60 y la revisación para la pileta de $10 a $20. Ante esto, el Secretario de Bienestar Universitario Alfredo Daroni respondió  a los medios que estos aumentos son necesarios porque se han distribuido los comedores y porque hace dos años no se actualizaban los precios.

Edith Liquitay, presidenta de la FUSJ, explicó la medida y afirmó que “uno de los aumentos más sentidos fue el del comedor”. Al sacar cuentas, entre todos los aumentos un estudiante universitario pagaría $480 al año. “La última revisión fue en 2011, se intentó aumentar el comedor pero al final no lo tocaron. No es que sea imposible, pero son muchas cosas juntas”, señaló Liquitay y añadió que “en este momento la situación de la Universidad es bastante crítica en cuanto a presupuesto. Le pedimos al Consejo Superior que busque una solución para que nos suframos esos ajustes”.

Si bien la Universidad entrega becas a cierta cantidad de estudiantes que no pagan ni el comedor ni la cuota del Palomar, “son 700, en perjuicio de 15.000”, manifestó la Presidenta de la Federación. “Tienen que buscar una solución. Hay estudiantes que pueden hacerlo, pero otros no”, afirmó Liquitay y propuso la “búsqueda de recursos propios o de la Nación”.

De este modo, la estudiante expresó que “nuestra función es estudiar y ser el futuro, no podemos decirle a la Universidad cómo administrar los fondos”. Y agregó: “Ante todos los aumentos la Universidad responde con más aumentos y no se incrementa la calidad ni la cantidad de becas”.

Cabe destacar, que la Federación considera demasiado bruscos los cambios y resaltan la “falta de comunicación con el Secretario de Bienestar Universitario, porque se tomaron muchas medidas sin ser informados los estudiantes”.

Además, Edith destacó que bajó mucho la cantidad de comensales porque esos $2 “son pasajes de colectivo”.  “Esperaremos hasta el miércoles una respuesta, y estamos articulando acciones con los Centros de Estudiantes. No es un capricho estudiantil, es una medida justa”, finalizó Liquitay.