San Martín sacó las garras y despedazó a Tigre

El verdinegro logró un triunfo vital como visitante que le permite mantener intacto su sueño de quedarse en primera por una temporada más.

Ganador. La gran figura del partido, Claudio Riaño, festeja el gol de apertura en Victoria.

 

Fue la tarde/noche soñada para San Martín. El verdinegro llegó a Victoria con la irregularidad de ganar en el Pueblo Viejo y perder fuera de casa, pero en el “Monumental” de Tigre se reencontró con un partido ideal que le permite mantener su sueño de quedarse en la máxima categoría del fútbol argentino. No será sencillo, pero no está muerto quien pelea.

A pesar de que llevaba diez fechas sin ganar de visitante, el equipo de Rubén Darío Forestello salió de movida decidido a buscar los tres puntos y se los llevó merecidamente. Apenas tuvo unos minutos de distracción, previos a la culminación de la primera etapa, que fue cuando el local encontró el descuento poniendo un manto de suspenso para el segundo tiempo.

La gran figura del encuentro fue Claudio Riaño, quien tuvo dos definiciones exquisitas para concretar dos golazos. En el primero, fue a lo Messi, dejando sentado al arquero Damián Albil y en el segundo de su cuenta personal volvió a picársela al arquero después de superar en la corrida a dos defensores rivales. El Gato Caprari fue el autor del segundo tanto, decorando una gran jugada colectiva. Por su parte, Tigre tuvo problemas para generar peligro y pagó cada error defensivo que cometió.

Vital triunfo del Santo del Pueblo Viejo, que no solo sirve para cortar la racha sin sumar de visitante justo cuando dos de los tres encuentros que le quedan son en esa condición: Belgrano y River, sino que alimenta la esperanza para seguir soñando. Por el momento, superó a Independiente de Avellaneda en el promedio y ya pone la mira en Quilmes y Argentinos en la lucha por mantener el puesto de privilegio en la elite del fútbol nacional.