Quintero: "Fue un asalto como le puede pasar a cualquiera"

El lunes 17 de febrero, un intento de asalto terminó la hospitalización del Secretario General del Sindicato de la Televisión, tras recibir tres disparos de arma de fuego. Milagrosamente salvó su vida. Ya fue dado de alta y comenzó la rehabilitación.



Mario Quintero estaba en el interior de su departamento del primer piso, ubicado en calle Urquiza y Genera Paz, cuando imprevistamente por la ventana ingresó un delincuente esgrimiendo un revolver. Según relató el hijo del sindicalista en aquella ocasión, Quintero quiso defender a su familia del ataque, forcejeó con el delincuente y terminó herido de tres disparos.

Después de la recuperación y la posterior alta médica, Quintero dio detalles del hecho. "No puedo dar detalles porque hay una causa que está en proceso judicial. Pero lo que pasó fue que ingresó una persona a mi domicilio, fue uno de estos asaltos que se dan al voleo", puntualizó el gremialista. Quintero aseguró que "esta persona apuntaba a mi familia, forcejeamos y pasó esto de los disparos. Pero gracias a Dios estoy bien, dentro de todo lo malo porque tengo que seguir con una cirugía más para que me saquen los proyectiles alojados. Eso fue lo que sucedió, un asalto como le puede pasar a cualquiera en estos días".

El representante de los trabajadores de la televisión hizo hincapié en que el hecho fue fortuito, que el delincuente vio la ocasión de subir hasta la ventana e ingresar a la vivienda sin saber a quién pertenecía. Quintero relató que "obviamente alguien lo ayudó a llegar al primer piso e ingresar por la ventana. Yo le seguí hasta poder sacarlo del departamento, forcejeamos y lo tiré del departamento".

Los disparos que recibió el sindicalista fueron en el cuello, un hombro y a la altura del maxilar. "La semana que viene viajo a Buenos Aires para que me digan si los proyectiles van a quedar ahí o los van a sacar. De todos modos estoy haciendo rehabilitación por el tema del hombro y de la mano", puntualizó Quintero.

Por el hecho se efectuó la denuncia policial correspondiente, aunque todavía no hay pistas sobre el delincuente. "Nosotros somos trabajadores. Ahora tratamos de ser más cuidadosos ante esta enfermedad que es la inseguridad. Somos personas que tenemos que seguir adelante, somos personas de bien. Me tocó a mí como le podría haber tocado a cualquier persona", concluyó.