Paro docente: Padres exigen al Rector que tome decisiones drásticas

En medio del conflicto docente y los paros interminables, producto de una actitud tozuda (en gran parte) de las autoridades de ADICUS, alumnos y padres silbaron al Rector Oscar Nasisi durante un acto de entrega de netbooks en la Escuela Industrial. El reclamo comienza a tomar otros tintes.

Nasisi recibió quejas y exigencias de padres, en un acto de entrega de computadoras.

 

El acto de entre de computadoras en la Escuela Industrial, contó con la presencia del Rector de la UNSJ Oscar Nasisi, el Vicegobernador Sergio Uñac y autoridades del Ministerio de Educación, además de padres, alumnos y docentes.

Mientras Nasisi hacía alusión en su discurso al conflicto por el salario docente, y la compleja consecuencia de los paros en la educación, se produjo una silbatina por parte de los padres, que exigieron soluciones concretas y que se tomen medidas determinantes ante la falta de profesores, como descuento salarial.

El Rector, explicaba que “desde este primer paro vimos qué podíamos hacer para ayudar a todos los chicos. Estuvimos pensando permanentemente y buscando alternativas de medidas de fuerza par no perjudicar a los estudiantes. Los docentes decidieron hacer paro, nosotros manejamos el salario, nosotros simplemente tratamos de garantizar la educación”.

Sin embargo, y aunque muchos saben que la primera y última palabra depende de la Nación, los padres impusieron al Rector que dentro de las posibilidades, se tome alguna postura al respecto del conflicto.

Una mamá, manifestó que “en otras provincias inmediatamente los mandan a la justicia y tienen que volver las clases, acá no. Desde marzo reclaman acá. Ustedes firmaron una paritaria a junio”.

En medio del griterío, el Vicegobernador Sergio Uñac intentó mediar, y prometió en nombre del Gobierno Provincial tratar de negociar soluciones, aunque “no tenga injerencia”.

Está claro que este conflicto llegó más lejos de lo esperado: En vez de tirar todos para el mismo lado, las partes cada vez se ven más enfrentadas. Lo cierto es que la responsabilidad es de todos: no hay un blanco específico a quién apuntar.