Esta noche mirá atentamente el cielo...

Este fin de semana el cielo nos brindará un regalo más. Para todos los amantes de la Luna y las estrellas, estos simples y maravillosos fenómenos…



 

Ocurrirá durante todo el fin de semana. La Luna estará más cerca de la Tierra que en cualquier otro momento de su recorrido elíptico, y podremos observarla más grande, brillante y por supuesto, llena. Además, una lluvia de estrellas podrá verse en el horizonte norte, bien  bajito, cada hora de la noche.

Carlos Mallamaci, Encargado del Observatorio Félix Aguilar, explicó ambos fenómenos y resaltó que son totalmente independientes uno del otro.

“Lo de la Luna es un fenómeno que no debería sorprendernos porque en su recorrido vital alrededor de la tierra a veces está más cerca y a veces más lejos, dado que la órbita es una elipsis. Este finde estará en su máximo acercamiento. Si somos observadores habituales de la luna veremos una luna luminosa, grande, brillante”, indicó.

La Luna da una vuelta entera por mes alrededor del planeta Tierra, por lo tanto para comparar el diámetro deberíamos ser frecuentes miradores del satélite. Sin embargo, es un detalle maravilloso que podrá contemplarse a simple vista.

La Luna puede cambiar su distancia respecto de la Tierra entre 350.000 kilómetros y 406.000 kilómetros. Esta noche, estará más cerca de la primera distancia, que cerca del horizonte tiene un efecto imponente increíble.

“En cualquier lugar con cielo libre, horizonte libre. En el campo el efecto es más bonito todavía”, aconsejó Mallamaci.

Por otro lado, si tenemos suerte podremos ver a las estrellas “Poseídas”, una lluvia de restos de un cometa, ubicadas en una zona por donde la Tierra atraviesa cada cierto periodo de tiempo. ¿Por qué poseídas?

“Se toman el nombre de la constelación Perseo, ya que parece que las estrellas salen de esta. En esta fecha la Tierra atraviesa una parte del espacio donde alguna vez pasó dicho cometa, y dejó residuos en el espacio”, aseguró el especialista. Justamente, estas “estrellas” son restos del cometa, cuando la tierra atraviesa esa zona esas rocas penetran en la atmósfera, se tornan incandescentes y caen las estrellas fugaces.

“En esa región hay mucho residuo y mucha es la cantidad de restos que ingresan y encienden. Se pueden ver 50, 60, y hasta 100 por hora”, agregó Mallamaci.

Una no muy buena noticia, es que en nuestro hemisferio será complicado contemplar esta belleza, dado que Perseo se encuentra en el hemisferio Norte, por lo que será necesario estar en campo abierto y observar bien abajo sobre el horizonte.

Hoy, entonces, tendremos una noche digna de contemplar. Solos, con amigos, enamorados, a la luz de un fogón, con un asado, con música, en silencio. El cielo siempre amerita ser observado. Es una manera de recordar de qué estamos hechos y conectarnos por un minuto con la esencia de nuestro universo.