La historia del violinista de la Galería Estornell: Del clásico al reggaetón, con humor

Cultura
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Octavio Perón tiene 20 años y despliega su talento sobre calle Mitre. Empezó casi de casualidad y se le abrió una enorme puerta laboral que lo llevó a tocar en eventos sociales en los que muestra también sus dotes de animador.

Foto exclusiva de Mara Belzagui para DIARIO MÓVIL




Es ya una fija ver a un jovencito tocando el violín en la puerta de la tradicional Galería Estornell. Se llama Octavio Perón, tiene 20 años y desde los 6 está encantado con la música. El primer contacto con un instrumento fue cuando agarró el piano del abuelo. "Me gustaba pero no podía llevar el piano al hombro o enchufarlo por ahí, así que buscaba otro instrumento para andar", contó a DIARIO MÓVIL. "Y en una siesta sanjuanina, con un silencio tremendo, pasé por la Escuela de Música y se escuchó tremendo un violinista. Le hinché a mi mamá para que me lo comprara y a los 10 empecé a tomar clases", recordó.


Foto exclusiva de Mara Belzagui para DIARIO MÓVIL

Desde entonces, tocó en una orquesta de Santa Lucía con 5 amigos. "Un día fuimos a buscar a la hermana de uno de los chicos porque queríamos tomar una gaseosa o algopero no teníamos un mango y ella trabajaba en un café. Entonces para llamarle la atención desde afuera del local empezamos a sacar los instrumentos. De repente la gente que pasaba nos tiraba billetes. La chica nunca salió, pero hicimos como $120 y pudimos comprarnos la coca, etc", relató.

"Un día pasando por el centro vi que acá un nene gritó y la acústica era impresionante. Me quedé acá y me empezaron a llamar para contrataciones. Me cayó la ficha de que es porque en esta galería hay muchos locales de trajes de alquiler o de cotillón", recordó sobre la oportunidad de trabajo que se le abrió en ese sitio. También le empezaron a pedir más cosas en el repertorio. En un bautismo le pidieron que haga temas de reggaeton. Sin embargo, en el violín practicaba otro tipo de composiciones. Sin embargo incursionó y en 4 días pudo sacar "Felices los 4", "Despacito", "Cuatro Babys", "La bicicleta".  "Y tengo un show cómico con el que hago sonidos con el violín, para hacerlo más original", agregó.


Foto exclusiva de Mara Belzagui para DIARIO MÓVIL

Todo ocurrió gracias a ese punto privilegiado del centro comercial, por el que pudo conocer a funcionarios y personalidades de San Juan. Pero también implicó mucha exposición a los vivos también. "El año pasado uno vino y hace como que tira dinero en el estuche pero pegó el manotón y me robó. Fui a corretearlos, eran dos, uno llevaba la plata y el otro el violín. Apunté al violín", contó Octavio. La otra mala experiencia fue cuando ocurrió el terremoto en Chile y se sintió fuerte en San Juan. "De los nervios sólo pude juntar el estuche del violín con la plata. Me descompuse y me crucé a la plaza con la señora del local de trajes de novias. Una gente bien vestida hizo como que me ayudaban y me robaron todo. Eran $200 nomás, pero me molestó la actitud de aprovechar un momento tan vulnerable".


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