Policía se defendió de un robo y mató a motochorro

El oficial dio la voz de alto y disparó, refugiado tras un vehículo. 

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Un agente de la Policía de la Ciudad mató a uno de los motochorros que lo quisieron asaltar. El efectivo iba en su moto vestido de civil por las calles de Gerli, partido de Avellaneda, cuando los delincuentes lo abordaron. Al abatido no le encontraron el arma aunque se investiga si se la llevó su cómplice, que se dio a la fuga.

Todo sucedió ayer en el cruce de José Martín de la Serna y Vélez Sarsfield, a unas ocho cuadras del shopping Alto Avellaneda, y el ladrón muerto estaba desarmado. Según fuentes policiales, el policía explicó a sus pares de la Bonaerense que iba a bordo de su Honda Twister roja y blanca cuando una Yamaha 125 negra se le puso a la par. En esa moto iban dos hombres que lo apuntaron con una pistola.

Ante esto, el policía, identificado como Matías Luna, de 23 años -que trabaja en la División Operaciones Urbanas de la Ciudad- disminuyó la velocidad, se bajó de la moto y dio la voz de alto, refugiándose detrás de una camioneta. Según su testimonio, uno de los ladrones le disparó dos veces, por lo que él respondió el ataque con su arma reglamentaria.

A raíz de ello, uno de los delincuentes se escapó del lugar mientras su cómplice quedó tendido en el piso, junto a la moto, gravemente herido en una muñeca y el estómago. Las fuentes indicaron que fue trasladado al hospital Perón pero murió en el camino.

¿Cómplice herido?

El delincuente muerto fue identificado por su mamá, que les refirió a los policías que sabía que su hijo "no andaba en nada bueno". En tanto, sospechan los investigadores que el ladrón que huyó también resultó herido, por lo que se dio el alerta a todos los hospitales de la zona por si ingresa alguna persona baleada.

Interviene en el caso la UFI N°1 de Avellaneda, de la fiscal Olmos Coronel, quien caratuló el caso como "homicidio agravado por el uso de arma". Los pesquisas buscaron cámaras de seguridad en la zona para confirmar o no la versión dada por el efectivo de la Policía de la Ciudad.

La Justicia también debe determinar si hubo una legítima defensa en su accionar o un exceso, en lo que podría calificarse como un caso de "gatillo fácil". El uniformado será citado a declarar en las próximas horas.