Julio hizo con sus propias manos la imagen del CURA BROCHERO que bendice a San Juan

La escultura del Cura Brochero que se encuentra entronada en el departamento 9 de Julio es obra es artista cordobés Julio Incardona. Esta obra, como todas las que el escultor ha realizado en distintas partes del país, guarda una estrecha relación entre la pasión por el arte y la devoción hacia el Beato. Es por eso que el nivel de detalle bajo la técnica del hiperrealismo lo posiciona a Incardona como uno de los referentes más importantes de la Argentina esculpir las mejores obras de la imagen del Cura Gaucho, y San Juan tiene el honor de poseer. 

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Julio Incardona,  es escultor y de gran talento. Es el autor de distintas imágenes del Cura Brochero que se pueden apreciar en distintas partes de la Argentina, colocadas en lugares especiales. Por ejemplo la imagen que está en el Santuario de Cura Brochero ubicada a un lado de la tumba con las reliquias del Cura Gaucho, aquellas otras donde aparece sentado y tomando mate en el museo donde falleció, y otras en la Basílica de Villa Dolores. Además tuvo en sus manos la labor de realizar la escultura del Cura Brochero que llegó a San Juan, precisamente al departamento de 9 de Julio.

Pero nada podía ser casualidad en esta historia: ni la profesión de Julio, ni su relación con el Cura Brochero. Todo tiene un origen mucho más profundo que lo intangible. Tras una serie de sucesos que comprometían su pasar económico en su profesión originaria como kinesiólogo, y los sueños con el Cura Gaucho que se repetían, fue el detonante para que Incardona comenzara un proceso que lo lleva hoy a convertirse en el escultor referente católico cordobés, reconocido en todo el país, incluyendo a San Juan, por sus obras.

 Este proceso nació por el año 2012, antes de la beatificación del Cura Brochero. “Fue una madrugada en donde me desvelé y me desperté, pero sin motivo alguno. Había escuchado que Cura Brochero iba a ser beatificado, pero muchas veces es el cariño que uno le tiene al cura que esa madrugada me fui al taller y empecé a trabajar en una piedra de yeso a tallarla y en la mañana tenía hecha una parte, el esbozo de la idea. Recuerdo que enfrente vendían un sombreros y el compré un sombrero alón y se lo coloqué a la imagen y ya empecé a imaginármela. Ahí fue brotando de apoco y a medida que la fui haciendo me fui dejando llevar, cuando uno hace una obra de esta, por el viento”, cuenta Julio Incardona en una entrevista para DIARIO MÓVIL, sobre el  proceso creador de las imágenes del Beato.

Cuando el escultor ya tenía avanzada la imagen del Cura Gaucho, le compartió fotografías de lo que hasta el momento tenía esculpido a una monja amiga y ella hizo llegar estas hasta el monseñor Santiago Olivera, quien se entera y concurre a su taller. “No podía creer que viniera un obispo a mí taller, era algo insólito para mí y uno como artesano no tiene esta oportunidad. Llegó, lo vio, le gustó y me dio el visto bueno. Fue ahí cuando empecé a trabajar. El monseñor me fui guiando también con palabras, frases, me compartía videos. También empecé a escuchar mucho el Canto Brocheriano y así fue surgiendo la imagen”, explica Incardona.

En la actualidad cada pieza que esculpe piensa el lugar en donde tendrá el destino. Sobre la escultura que se encuentra actualmente en San Juan, en el departamento 9 de Julio, el artista manifiesta que “en especial con esta imagen, Oscar Sánchez me explica el milagro de esta nena de San Juan y ahí empiezo a tomar mucha más conciencia de los milagros de Brochero, de la vida de él y como fue obrando en la gente. Entonces esta imagen tiene esa particularidad que muestra la enfermedad que él tiene y por eso hago hincapié en la dificultad y los  problemas que Brochero enfrenta con el Evangelio colocado en el pecho. Fue por esto que en sucedió en San Juan, que fue tan feo y tan duro.”

Una escultura para los fieles sanjuaninos

Sobre el proceso en la creación de sus esculturas, Julio Incardona tiene una ventaja que sabe cómo explotarla. El artista ha logrado llevar una de sus profesiones hacia otro campo. Esto es como médico conocedor de la anotomía humano, transporte el detalle del cuerpo hacia el yeso, brindando toda la expresión necesaria para que sus obras de Brochero hoy sean las más reconocidas en toda la Argentina.

La técnica empleada en la escultura del Cura Brochero en San Juan es el hiperrealismo. Julio se formó en la Escuela Gabriel Dubois, cuya tendencia es el romanticismo francés. Es una escuela que funciona en Altagracia y tuvo con maestro a Luis Hourgras.

“La técnica es tratar de lograr la esencia en los trazos, la esencia del alma, la mirada, los gestos bien logrados, los detalles, los trazos bien finos para llegar al alma del personaje y esto nos hace llevar a la imagen. Luego la hice de resina policromada al óleo, esta es la técnica exacta”, explica el artista.

Además, la obra entronada en San Juan mide un metro de altura y el proceso de creación le llevó a Incardona dos meses desde que comenzó hasta que la concluyó.

Una vida de devoción hacia el Cura Gaucho

Muchos devotos a Cura Brochero sostienen que es un Santo especial, pues su palabra evangelizadora trasciende la temporalidad y se puede enmarcar en tiempos actuales. Para Julio Incardona, esta es una de las cualidades que hace que le hace tener fe hacia el Beato. “Al leer la vida y escuchar el Canto Brocheano uno se da cuenta que es un argentino más y les suceden las mismas cosas que a nosotros. Es maravilloso de lo de Brochero porque le sucede lo mismo que sucede hoy con los 200 años de Patria”, sostiene El artista.

Además, “como cordobés, para mí Brochero es todo. Desde que somos niños todos vamos allá, a bañarnos y caminamos por los senderos por donde él caminó y no lo podemos creer. Esto se empieza a vivir desde chiquito, y ya de grande es una cosa que entre solo, no hace falta mucho más”, concluye Julio Incardona.