Ocurrió en la mañana del jueves. Una abuela sufrió un asalto en su propia vivienda por parte de ladrones que la encerraron en el baño y le robaron $150.000. Uno de los malvivientes le pidió perdón.

Fue una mañana terrorifica para una abuela de 63 años, oriunda del barrio La Madera, en Guaymallén, Mendoza. En las primeras horas del jueves, tres ladrones ingresaron a la vivienda de la víctima para robar.
La modalidad de los delincuentes consistió en actuar mientras la dueña de casa estaba baldeando la vereda. Al ingresar a su hogar, se encontró con los malvivientes en el interior quienes decidieron encerrarla en el baño, dopar a su perro y robarle $150.000, más joyas familiares. Fue un asalto que pareció tener una planificación previa, porque llevaban guantes blancos y barbijos. Sumado a ello, se tomaron una hora para revisar cada rincón de la casa y llevarse lo que podían.
Lo más curioso es que, afortunadamente, no hubo violencia hacia la mujer y, además, uno de los ladrones se disculpó antes de darse a la fuga.