La desesperación de una mamá pocitana: su hijo tiene epilepsia y necesita un remedio urgente, pero ella está sin trabajo

Se le quemó la casa. El terremoto dañó lo que quedaba. Las lluvias empeoraron todo. Sufrió violencia de género. Y ahora vive en un módulo con sus 4 hijos, mientras afirma que su ex no le pasa la cuota alimentaria.

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Santiago necesita ayuda para conseguir su remedio para la epilepsia.

Micaela Morales es un mamá pocitana que está pasando por un difícil momento. Vive con sus cuatro hijos en un módulo habitacional, no tiene trabajo y necesita ayuda porque uno de sus pequeños requiere de un medicamento que no puede comprar.

Morales dialogó con Diario Móvil y contó que su hijo de 8 años sufre de epilepsia desde que tiene 2 años y necesita un remedio que se llama Luminal. Sólo le quedan dosis para una semana más, pero no tienen como comprárselo y por eso pide ayuda.




"Tal vez alguien lo tiene en su casa y no lo usa, a mi hijo le hace falta", señala la mujer a este medio.

Una familia golpeada pero que no se rinde

La familia viene atravesando serios problemas que comenzaron hace 3 años cuando se le incendió la vivienda. Luego el terremoto les dañó la casa y las lluvias la dejaron en peores condiciones todavía.

Recibieron un módulo habitacional y están viviendo ahí. Pero la mujer contó que se separó de su marido por violencia de género, ya que éste la agredía físicamente y ahora afirma que no les está pasando la cuota alimentaria.

Micaela está sin trabajo y tiene a cargo a sus cuatro hijos a quienes cuida ella sola. La familia sobrevive con las ayudas que le da a un vecino de una finca y su mamá que es jubilada. Necesitan urgente poder salir adelante o por lo menos conseguir el medicamento para el pequeño.

"Venimos de mal en peor, se nos quemó la casa, después nos tiró abajo lo que quedaba el terremoto y la lluvia afectó más. Por suerte, ahora tenemos el módulo que nos dio el Gobierno, es bueno, no se llueve ni nada, pero es muy helado y como no tenemos ni para el gas, nos calentamos con gas con brasas y es peligroso también tengo que hacer de comer todo con leña porque no he podido comprar gas", contó Micaela.

En tal sentido agregó: "Mi mamá es una pobre jubilada y nos manda pan y esas cosas. Con una tarjeta compro cosas para comer, pero estoy llegando al tope. No me quiero dejar decaer porque tengo niños y por ello sigo".

Los dibujos del pequeño

Micaela compartió los dibujos de su hijo hace en la escuela como parte de un tratamiento ya que le dijeron que dibujar le iba a hacer bien y su maestro de plástica lo ayuda a salir adelante dibujando.

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Para comunicarse con Micaela: 2644473693.