Pronóstico: La transición al verano será dura

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El fin de semana dejó claro el inicio de un agosto típico. Inestable, impredecible, transitorio. El meteorólogo Germán Poblete brindó un pronóstico para los próximos días y hasta se aventuró a adelantar que se viene un verano potente.

La transición hacia el verano será dura...

 

“Agosto tradicionalmente es muy variable, alternancia de zondas con llegadas de frentes. Es un mes ideal para enfermarse, vi mucha gente que estaba de chombita ayer en la media tarde, y obviamente el sábado fue zonda bastante fuerte, además del domingo pre anunciado”.

Así lo destacó el especialista y aseguró que tendremos una semana variadita. Para hoy y  mañana, se prevé la posibilidad de un zonda en altura, que de aflojar la burbuja fría debajo, permitiría que baje en la tarde noche. Otro pulso ventoso generaría un nuevo descenso de temperatura para el miércoles y jueves. Desde el viernes, el fin de semana se anticipa recuperado,  con cielo despejado y temperaturas moderadas, gracias al dominio del sol.

En general, las mínimas van alejándose del cero de aquí en más, aunque la máxima seguirá siendo baja para la época. En términos medios la temperatura comenzará a subir, dado que el sol se encuentra en esta época más tiempo por encima del horizonte.

“Las mínimas no se acercarán al cero. Llevamos 23 días con heladas, tenemos una media de 30 días con heladas. Será variada la máxima pero con mínimas entre los 4 y 8 grados”, explicó el especialista.

Sabemos que en este momento del año comienza un proceso de cambio de estación, que anticipa la primavera, que lejos de ser una estación hermosa, trae temperaturas variables, vientos fuertes y cercanos.

“Hay recambio de masas que se hace muy súbito en el tiempo y espacio, a diferencia del otoño que es la mejor estación de San Juan, donde el proceso de pasaje es más moderado con predominancia de días despejados”, indicó Poblete, a la vez que le puso comienzo al verano: Se adelanta al 14 de noviembre.

“El famoso fenómeno del Niño que esperábamos se retrasó mucho, y si se produce entre noviembre y diciembre ayuda a que la temperatura suba en el sur. O sea que estamos ante un verano muy caluroso”, dijo.

Verano intenso implica no solo calores insoportables, sino tormentas cortas, súbitas y dañinas, intensas y localizadas espacialmente.
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