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Esperó 16 horas para ser rescatada en Arroyo Seco: "Pedíamos socorro pero los bomberos no podían entrar"
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Itatí Peralta perdió su casa y está damnificada junto a otras 25 familias de la zona.
Iatí Peralta, de 51 años, esperó junto a su hija más de 16 horas para ser rescatada en Arroyo Seco, Santa Fe, una zona que quedó bajo el agua luego de las intensas lluvias del pasado fin de semana. "Estábamos desesperados. Pedíamos socorro, que entraran los bomberos, pero no podían entrar", contó Peralta hoy a Radio Nacional.
Es una de los 200 evacuados de esta ciudad, a unos 30 kilómetros de Rosario, que se inundó tres veces en los últimos 21 días. Peralta dijo que había llovido mucho la mañana del domingo, pero pensaron que no pasaría nada grave. "No pensamos que nos íbamos a inundar". Fue a las 14 cuando el agua comenzó a entrar en su casa. "Cuando vimos que el agua venía del arroyo, comenzamos a pedir ayuda".
Los bomberos empezaron a evacuar el barrio, pero el diluvio impidió que pudieran llegar hasta su casa. "Gracias a algunos vecinos, mi hija de 23 años y yo pudimos subir arriba del techo de chapa de un vecino. Yo soy una persona grande, no sé cómo lo hice... Nosotros de la desesperación queríamos salir, pero los bomberos no podían entrar. No podían entrar porque era terrible la corriente de agua".
En el techo esperaron durante horas junto a dos familias más, que tenían dos niños: un bebé de dos meses y otro de dos años. "Nos acalambrábamos, pero teníamos que aguantar... Queríamos salir de la desesperación pero no podíamos". No tenían forma de saber cuánto tiempo había pasado, hasta que vieron que comenzaba a amanecer. "Solo entonces pudimos ver al primer bombero".
A primeras horas de la mañana del lunes, ella y su hija fueron trasladadas al complejo Los Tiburones, al igual que otras 25 familias. "Lo perdimos todo. No tengo nada a dónde volver. Mi casa quedó hecho un desastre, irrecuperable", dijo Peralta. Denunció que falta el agua potable en la zona y exigió atención a las autoridades: Yo no pienso volver a mi casa hasta que tenga mi situación resuelta. Con un bolsón de ropa a mí no me lo resuelven".
Está temerosa, al igual que otros vecinos, que comience a llover de nuevo. "Nos dicen que puede llover el sábado... Siento mucho dolor por haberlo perdido todo".
Fuente: La Nación
Iatí Peralta, de 51 años, esperó junto a su hija más de 16 horas para ser rescatada en Arroyo Seco, Santa Fe, una zona que quedó bajo el agua luego de las intensas lluvias del pasado fin de semana. "Estábamos desesperados. Pedíamos socorro, que entraran los bomberos, pero no podían entrar", contó Peralta hoy a Radio Nacional.
Es una de los 200 evacuados de esta ciudad, a unos 30 kilómetros de Rosario, que se inundó tres veces en los últimos 21 días. Peralta dijo que había llovido mucho la mañana del domingo, pero pensaron que no pasaría nada grave. "No pensamos que nos íbamos a inundar". Fue a las 14 cuando el agua comenzó a entrar en su casa. "Cuando vimos que el agua venía del arroyo, comenzamos a pedir ayuda".
Los bomberos empezaron a evacuar el barrio, pero el diluvio impidió que pudieran llegar hasta su casa. "Gracias a algunos vecinos, mi hija de 23 años y yo pudimos subir arriba del techo de chapa de un vecino. Yo soy una persona grande, no sé cómo lo hice... Nosotros de la desesperación queríamos salir, pero los bomberos no podían entrar. No podían entrar porque era terrible la corriente de agua".
En el techo esperaron durante horas junto a dos familias más, que tenían dos niños: un bebé de dos meses y otro de dos años. "Nos acalambrábamos, pero teníamos que aguantar... Queríamos salir de la desesperación pero no podíamos". No tenían forma de saber cuánto tiempo había pasado, hasta que vieron que comenzaba a amanecer. "Solo entonces pudimos ver al primer bombero".
A primeras horas de la mañana del lunes, ella y su hija fueron trasladadas al complejo Los Tiburones, al igual que otras 25 familias. "Lo perdimos todo. No tengo nada a dónde volver. Mi casa quedó hecho un desastre, irrecuperable", dijo Peralta. Denunció que falta el agua potable en la zona y exigió atención a las autoridades: Yo no pienso volver a mi casa hasta que tenga mi situación resuelta. Con un bolsón de ropa a mí no me lo resuelven".
Está temerosa, al igual que otros vecinos, que comience a llover de nuevo. "Nos dicen que puede llover el sábado... Siento mucho dolor por haberlo perdido todo".
Fuente: La Nación
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