El PARAÍSO SANJUANINO, en la Quebrada "La Escondida", ¿Lo conoces"

El turismo forma parte de uno de los principales sectores económicos a nivel mundial, siendo objeto de estudio en diversos destinos geográficos. En San Juan, hay un emprendimiento que apuesta por prestar servicios turísticos en distintos sitios naturales de Sarmiento. En particular, promocionan guías y senderismo a un lugar poco conocido de este departamento. Se trata de la quebrada La Escondida, cuya belleza cautiva a quienes la visitan.

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Los ecosistemas montañosos en todo el mundo se encuentran desde el Ecuador hasta los polos y ocupan aproximadamente la quinta parte de la superficie de los continentes y las islas. Más allá de sus características comunes como un relieve relativamente elevado -o una variación topográfica muy marcada- y unas fuertes pendientes, las montañas presentan una diversidad notable para la conservación de la biodiversidad.

La provincia de San Juan, al tener una geografía en donde predomina una geodesia rocosa, tiene en su extensión varios ecosistemas en sus montañas. Algunas de ellas más conocidas y otras, por diversos motivos, se mantienen un tanto veladas tanto para turistas como lugareños.

En este sentido, en el departamento Sarmiento se encuentra un sitio que cautiva por la belleza a los privilegiados que la hasta allí se dan cita. Se trata de la quebrada La Escondida o Pérez Maiky, está ubicada en el distrito Cienaguita, y para hacer conocer este lugar hay una emprendimiento turístico que realiza guías y excursiones. Se trata de “Alma de Pedernal”.

“Actualmente es un sector de escalada muy conocido por los deportistas de esa disciplina. Es un paisaje muy hermoso, con una cascada de agua, con paredes de muchas fisuras para realizar actividades para todos los gustos y grados”, cuenta Patricia Zapata, una de las creadoras de este emprendimiento, en una entrevista para DIARIO MÓVIL.

Con respecto a los servicios que “Alma de Pedernal” ofrece en esta quebrada es senderismo de bajo impacto, que es ideal tanto para niños como adultos, y la época idea ronda de marzo a noviembre. Se puede pernoctar en el lugar en carpas para tener un contacto más profundo con la naturaleza, pues antes de entrar al cañón hay un árbol – Ruperto- muy cómodo para acampar, o bien se puede hospedar en la casa del guía Federico Balmaceda.

“Nosotras tenemos nuestra joya turística que es el Valle de Pedernal, que en estos dos últimos años ha florecido gracias al turismo, a la municipalidad que nos ha apoyado en cada evento, a nuestro pueblo que vio que del turismo una oportunidad de salir a flote y recuperar su estabilidad económica. Pero esto recién empieza buscamos tener la infraestructura necesaria para recibir turistas de todas partes del mundo y para ello hace falta capitales que inviertan en el sudoeste de Sarmiento. Tenemos muchos lugares para ofrecerle vivir una experiencia inolvidable de contacto con la naturaleza”, expresa.

¿Cómo llegar? Desde San Juan, se sale por la ruta 40 hacia el sur. Al encontrarse en Media Agua, se debe tomar la Ruta 153 que sale hacia el oeste. “Pasar el pueblo de Los Berros y prestar atención para desviarnos hacia los pueblos Divisadero y Cienaguita por la ruta N° 319. Al pasar el pueblo Divisadero llegamos luego a Cienaguita, al entrar al pequeño poblado cruzamos un badén con un pequeño arroyo, para luego llegar al fin de esta calle. Doblar a la derecha y luego a la izquierda, para que luego de unos 8,5kms se llegue a la Quebrada de la Escondida”.

Una iniciativa para conocer bellos rincones de San Juan

El emprendimiento “Alma de Pedernal” fue creado por Adolfo Torres y Patricia Zapata. Luego se fueron sumando lugareños, prestadores turísticos, artesanos y productores. Se definen como un grupo de personas que realizan actividades y difunden el suroeste de la provincia. Realizan actividades turísticas en el Valle de Pedernal, Cienaguita, Retamito. Ahora han comenzado a buscar el atractivo turístico de Huanacache.

“El turista que nos visita es aquel que busca reencontrarse consigo mismo y su familia al vivir una experiencia con contacto directo con la naturaleza. Aquel que viene a visitarnos siempre vuelve. No solamente por el paisaje sino por la calidez de nuestro pueblo. Somos gente honesta, gente de campo, de creencias y tradiciones”, concluye Patricia.