Panorama para posibles paritarias locales

Roberto Correa Esbry, Subsecretario de Trabajo de la Provincia, explicó los procedimientos que implica la conciliación obligatoria, y su relación con las medidas de fuerza. ¿Qué predisposición tiene el Gobierno ante una eventual situación similar a la de la nación, en la provincia?

Correa Esbry resaltó las funciones de las Subsecretaría de Trabajo en caso de paritarias locales.

 

“A la violación del proceso de conciliación obligatoria se puede aplicar la sanción económica  a los gremios en función de la cantidad de trabajadores que estén involucrados en una medida en el marco de la conciliación obligatoria”, explicó el funcionario, aunque no es nada nuevo, y reafirmó que una vez decretada la conciliación “no se deberían llevar a cabo medidas de acción directa o indirecta y sí sentarse a negociar”.

“En un proceso que dura 15 días hábiles en la provincia, y en el Ministerio de Trabajo 10 días, que regula la Nación”, agregó.

En este momento, la Subsecretaría de Trabajo es incompetente y si ocurre paro, no puede emitir una sanción, dado que en la Provincia no se comenzó aún ningún proceso de negociación, y mucho menos de conciliación obligatoria. Una situación bastante conveniente para UDAP, que por el momento puede accionar sin preocuparse mucho por las sanciones.

“Si se convoca paritaria, la secretaría comienza a ser competente y obviamente ante una medida de orden local en relación a este proceso podemos llamar a Conciliación Obligatoria, o aplicar sanción ante una violación eventual”, aclaró Correa.

Esto tiene sentido cuando consideramos que la Subsecretaría de Trabajo es la autoridad de aplicación en el proceso de negociación colectiva, por lo que cuando se mantiene el diálogo entre las partes sin conflicto no interviene, caso contrario, sí.

“Homologamos el acuerdo paritario todos los años. Venimos sin conflicto hasta ahora, llevamos 2 o 3 años de inicio de clases normales. Porque se llego a acuerdos colectivos, en este caso esperemos que no tengamos que intervenir por el bien de la comunidad y de los chicos”, concluyó el funcionario.

Queda en duda si llevamos tanto tiempo con comienzos “normales de clase”. Por ahora, esperemos que el inicio de clases no se aletargue a favor de las prioridades que debe tener el país, además, que la situación en general logre un consenso justo.